Heracles y pandora

Escondido tras su capucha negra, como si fuera un guardián del inframundo, vestido de pies a cabeza con tan solo un manto negro le dijo:
- ¿Quieres jugar?

Es un juego peligroso, Probablemente no te vaya a gustar Pero... Trata de la vida y de la muerte, Ambas son necesarias, pero tantas veces tan manejadas al antojo de la época, Podemos ser atemporales, y de esa manera vas a poder ver y sentir algo que produce temor, pero que también produce placer, ¿pues acaso no es néctar el deseo de más saber?, Pero debo advertirte, Una vez tomada la decisión no hay vuelta atrás,  Solo hasta llegar al final

-tengo miedo- dijo ella

A decir verdad bastante, es normal que lo tengas, Pero es inquietante, De hecho tú ya tomaste la decisión, Yo solo espero por la respuesta.

Fue entonces cuando el guardián supo que ella no estaba preparada fue entonces cuando dijo:

- Te voy a evitar problemas

Pero de manera abrupta y sin tiempo de dar reversa ella dijo que si.

 ¿Si, que?-  pregunto el guardián

Hubiera deseado que hubieras dicho lo contrario, Estaba a punto de evitarte esto... pero necia es tu alma, inquieta es tu sed de conocimiento ,Como muchos y muchas vas a encontrar lo que buscabas, lo que nos remonta a una épocas atrás... Primero he de decirte que la palabra juego encierra un sin fin de posibilidades, ahora bien te contare, este juego consiste en lo siguiente justo después de la media noche se abren portales, portales del espíritu que pocos conocen, El miedo es una elección, pero tú ya tomaste tu decisión, ahora no es quien conocias quien te habla, quien habla... es algo más que una persona quien se expresa.

Ella sentía más y más miedo.

Es demasiado tarde, el libro ya fue abierto, Y debo decirte lo que de ahí he leído,  O si no esta puerta no tendrá sentido y el castigo será mucho mayor, Ese es el riesgo de saber algo, así no lo quieras, ni se puede evitar, tuviste tu oportunidad, Pero no la aprovechaste, tomaste las cosas a la ligera y yo no puedo detener a la "verdad", Ella se abre paso por sí misma y las serpientes ya empiezan a acercarse, Hoy he leído sobre la ley del intercambio equivalente, esa es la prueba del continuo presente, pues los humanos están condenados a vivir una y otra vez lo mismo, sin pasado y sin futuro, lo demás es un engaño auto infundado

En ese momento y tras un prolongado silencio. El guardián noto algo.

Mira que extraño- dijo él. Ahora lograste cerrar la comunicación, solo cuando viste que era verdad, Solo por ser tu primera vez y bajo la cláusula número 11-11, por hoy el juego ha terminado. Tu secreto será guardado.

Y fue así como la bóveda del submundo fue de nuevo cerrada, quien esa noche fuera su guardián temporal había logrado abrir un poco secretos de la realidad.